martes, 2 de marzo de 2010

Si las psicólogas de selección supieran leer, un paro de transportadores no sería tan grave.

¿No le ha pasado que en una entrevista de trabajo Ud. ya ha enviado su hoja de vida y la psicóloga no tiene ni idea de lo que dice en la misma?… por ahí va la cosa, me explico:

El 1 de marzo de 2010 hubo un paro de transportadores en la ciudad de Bogotá, Colombia (donde yo vivo), se extendió hasta el siguiente día y no se si mañana seguirá, todo dice que no; las razones son las de siempre, el  casi terrorista “gremio” de transportadores en busca de beneficios particulares inició el paro con disturbios violentos en algunas partes del sur de la ciudad, bloqueó vías para que el sistema de transporte masivo Transmilenio no pudiera funcionar, tiraron piedra, quemaron llantas… etc., (lo usual en ellos desde hace años, recuerdo eventos similares en mis épocas de colegio).

Para mi no hubo gran problema ya que cuento con el transporte de la empresa donde trabajo (fuera de la ciudad) así que me dejaron cerca de mi casa, solo tuve que caminar unos 15 minutos hasta mi casa lo cual no representa inconveniente alguno, de hecho aun sin paro de transportadores nunca he usado el transporte público para ese pequeño trayecto, me parece un gasto ridículo pagar por una distancia tan corta.

Muy entrada la noche hablé con el gerente de una reconocida cadena de comidas rápidas que vive muy cerca de donde yo vivo, le pregunté por su día, etc., me respondió que TERRIBLE, que perdieron millones de pesos por culpa del paro de transportadores ya que los empleados viven muy lejos y llegaron a trabajar muy tarde, y para empeorar las cosas, tuvieron que cerrar los locales 2 horas antes para que la gente pudiera lidiar con el enorme problema de llegar a sus respectivos hogares.

Continuó desahogándose contando su tragedia laboral, diciendo que tenía empleados muy al norte que vivían muy al sur, que habían tardado casi 4 horas en llegar al trabajo y no sabían como llegar de vuelta a sus casas; en ese momento vi que se repite el patrón que ya me pasó a mí y le pasó a mi novia hace poco, la enviaron a trabajar muy al sur, más exactamente a hora y media en bus (tomando 2 buses) mientras que a otra niña de la misma empresa que vive muy al sur, la enviaron a trabajar muy al norte, preciso a un lugar que habría quedado tan cerca a mi novia que habría podido caminar al trabajo. Absurdo !

En la empresa donde trabaja el señor la cosa pasa igual, tienen muchos locales al norte de la ciudad (la gran mayoría) pero una gran parte de los empleados viven muy al sur de la ciudad, aún en días sin eventualidades en el transporte, muchos empleados gastan hora y media o 2 horas en llegar a sus lugares de trabajo. También me confesó que por “cosas de la vida” hay algunos empleados de los pocos locales que hay al sur…. que viven al norte de la ciudad. Increíble.

Pensando en eso, recordé muchas de mis entrevistas de trabajo, donde la “psicóloga” de selección me puso a hacer por horas pruebas absurdas para identificar si soy un chimpancé o un humano, luego de eso me hace pasar a una entrevista más personal donde pregunta cosas que ya puse en la hoja de vida, cosas como donde vivo, cual es mi profesión, estado civil… etc.
Siempre he ha dado mucha rabia eso, porqué me preguntan cosas que ya les informé, porqué carajos me preguntan donde vivo si ya lo especifiqué en la hoja de vida… si !! esa que tiene en la mano!!

Esta gente no lee, o peor aun, no le importa lo que lee, el lugar donde vive una persona debe ser uno de los principales factores a analizar para decidir si se le contrata o no ya que influye directamente en la facilidad que tendrá la persona para llegar a sus sitio de trabajo, si le alcanzará el tiempo o no, en qué estado llegarán a trabajar, con qué gusto… etc. Eso es indicador de calidad de vida = calidad de trabajo.

Luego hoy en mi día de descanso forzoso veo los noticieros donde literalmente entrevistan a cientos de personas que viven en un extremo de la ciudad pero trabajan en el otro extremo.

Partiendo del hecho que la oferta laboral de personas es ridículamente superior a la demanda de la misma, creo que una empresa puede conseguir gente en prácticamente cualquier lugar de la ciudad, si necesita operarios, señoras de servicios generales, y demás personas sin mayores estudios académicos, encontrará personal por todas partes, debido a los reducidos ingresos de esas personas, la mayoría viven al sur de la ciudad, pero muy al norte también hay barrios enteros de gente con escasos recursos económicos, que puede cumplir perfectamente con esas labores.

Pero basándome en las entrevistas de los medios a las personas de bajos recursos el día de hoy, en mis experiencias de primera mano y demás, veo que hay una especie de juego irracional entre los empleadores y sus empleados: pareciera que las empresas al norte gustan de contratar personas de bajos recursos que viven al sur, y las empresas del sur buscan contratar personas pobres que viven al norte. Cosa extraña.

No se si las psicólogas de selección, jefes de personal, departamentos de recursos humanos o lo que sea, saben leer, no creo; pero en caso que si, les falta pasarse por una facultad de ingeniería y cursar un par de semestres de “Optimización de Recursos” o leer un libro sobre “Sentido Común”.

La calidad de vida de una persona es directamente proporcional a la calidad de su trabajo, cuando una persona gana muy poco y vive muy lejos de su trabajo, gasta más tiempo y dinero para llegar al mismo y regresar a su casa, demasiadas personas, en especial las más pobres, gastan al rededor de entre 3 y 4 horas diarias transportándose !! un gran porcentaje de ellas debe gastar más de 1 pasaje por trayecto, he sabido de personas que gastan 3 pasajes para poder llegar a sus trabajos. No hay derecho.

A sabiendas que a lo largo y ancho de la ciudad hay mano de obra (de toda clase), esta gente que selecciona a las personas para trabajar en las empresas debería justificar su salario haciendo BIEN su trabajo. No hay lógica en tener una oferta casi ilimitada de personas necesitadas de empleo y contratarlas por un salario de hambre para ponerlas a trabajar en el polo opuesto de donde viven; si su empresa es en el sur, pues contrate gente que esté lo más cerca posible, para que gaste el menor tiempo y dinero posible en transportarse.

Un empleado que vive cerca de su trabajo puede desplazarse en muy poco tiempo desde y hacia el mismo, aumentando el tiempo que realmente descansa y pasa tiempo con su familia,  reduciendo sus gastos (incluso a $0 si se transporta en bicicleta, patines, a pie u otros), de esa manera su CALIDAD de vida mejora impresionantemente y la calidad de su trabajo será fiel reflejo de ese hecho.  Además, en casos de eventualidades en el tráfico como un paro de transportadores, su empresa no perderá millones de pesos diarios porque sus empleados que viven en el polo sur no pueden llegar a picar el hielo en el polo norte. ¿No les parece? En lugar de perder millones, inviértalos en personal de contratación que sepa leer, que tenga sentido común, consideración con la población menos favorecida, etc.

Hasta la próxima…

1 comentario:

Anónimo dijo...

Le vuelven a preguntar todo para validar que sea verdad, y que no se invento cosas, es muy facil mentir en el papel escrito, es un poco más dificil mentir frente a alguienque lo esta analizando.