miércoles, 11 de febrero de 2009

Sin tetas no hay paraíso y sin carro no hay tetas

Nunca me vi la novelita aquella pero lo que alcancé a escuchar es muy parecido a la realidad, hay una relación muy directa entre las tetas y los carros, me explico:

Tranquilos, no es solo en Colombia, mundialmente hay una formula simple para que una mujer consiga quien la mantenga a cambio de una pequeña inversión en latonería y pintura, el viejo truco de jugar con las débiles hormonas masculinas.

Las mujeres saben que un par de pechos grandes son difíciles de resistir para la mayoría de los hombres, así que acudiendo a la ciencia, se mandan engallar para quedar como una uva, es decir, para dar ganas, para provocar, etc.

La victima masculina normalmente se siente atraída por este manjar y pues reacciona ante el estímulo ofreciendo placer a la mujer en cuestión, pero resulta que las mujeres no buscan (en ese caso) placer sexual, ellas buscan placer económico, es decir, si quiere jugar con ese par… tendrá que pagar.

¿ Prostitución ? Si, pero muy disimulada, una especie de prostituta de un solo cliente, algo así como un contrato de exclusividad.

¿ Pero qué clase de pendejo se deja sacar la plata por un par de tetas que ni siquiera son de verdad? Pues la clase de tipo que no distingue entre una muñeca inflable que habla y una mujer de verdad. Evidentemente.

Esta clase de tipo tiene características muy específicas; normalmente tiene dinero (el origen no entra en discusión ahora), regularmente tiene poca inteligencia emocional: cree que lo que quiere es lo que sus hormonas le indican; vive más de lo que piensan los demás que de lo que siente él mismo, es decir, si la vieja está buena para los demás con unas tetas de mentiras pues se la levanta para ganar aprobación social, así a él mismo no le genere mucho placer coger esos bultos de silicona, lo que le importa es más la imagen externa.

Podríamos seguir describiendo al tipilín, pero no vamos a salirnos más del tema, el cuento es que todo desemboca en una necesidad insoportable de diferenciarse de diferenciarse del resto a base de pertenencias, la más importante es el carro por supuesto, es la pertenencia más costosa que uno puede llevar prácticamente a cualquier lado. No basta con tener una casa de mil millones, porque no se la puede llevar a la 93 para “chicanear”, tampoco puede cargar con la finca ni con los caballos, yate, etc. Lo único realmente costoso que puede cargar es el carro,ahí está la llave para distinguirse de los demás sin necesidad de ser más. Todos lo ven diferente y lo tratan diferente.

Por ejemplo, he ido cientos de veces a todos los centros comerciales de la ciudad, muchas veces voy en carro, al hacerlo así desde la entrada los vigilantes lo tratan a uno de señor, siga por favor, bienvenido, gracias por su visita, etc. Porque el carro les indica que disque tengo plata y disque soy importante, inteligente y no se que diablos más, las niñas lo miran a uno más de lo normal, las vendedoras le sonríen a uno cuando uno pide sello para el parqueadero después de hacer cualquier compra…

Otras veces he ido (ya poco) a pié, es decir, cogiendo bus, así uno entra común y corriente, el trato es neutro, no me dicen gran cosa, dependiendo de la pinta, puede que yo tenga plata como puede que no.

Últimamente me he vuelto fanático compulsivo de la bicicleta, así que ando en esas 3 varillas para todas partes, y el trato es muy diferente, desde la entrada lo tratan a uno medio regular, hoy en el CC Santafé lo primero que me dijeron fue que me bajara de la bici, que por orden de la administración ya a uno le toca andar a pie dentro del centro comercial por seguridad; nada de buenas noches, ni de bienvenidos (iba con mi novia), en Arturo Calle el vendedor lo ve a uno con el casco en la mano y lo trata como si solo fuera familia Miranda, casi ni me atiende, andaba detrás nuestro como para asegurarse que no nos robáramos nada, hasta tuvo el descaro de decirme que me fuera para Unicentro porque “allá hay más surtido”, cuando salí no me dijo ni gracias por su compra, mucho menos “que vuelva” para el común de la gente, los que andamos en bici somos una partida de muertos de hambre que no tenemos ni para coger un bus. Concepto que perjudica en ocasiones y otras veces beneficia, como muy bien dice Patton

Obviamente bajo esos estándares sociales, nadie se va de levante en bicicleta, las viejas operadas dirán “que boleta”. La clave es ir en carro, y entre más costoso, nuevo y grande sea este, mucho mejor para conseguir muñecas inflables.

Entonces la ciudad, y el país en general anda en un plan de andar en carro todo el tiempo para que todo el mundo me “respete”, vean que tengo plata, que soy importante, exitoso; se den cuenta que soy el putas, las viejas entenderán que si tengo 100mil pesos semanales para gasolina, seguramente debo ganar bueno para comprarles muchas vainas, ropa, celulares, mantenimiento preventivo y correctivo (spa y liposucción)… y obviamente para mandarlas engallar con lo último en cirugías.

Así pues, entiendo perfectamente los trancones diarios, llenos de tipos y viejas que no salen en carro por lo largo de su recorrido, sino por esa necesidad chipchombiana de demostrar su estatus. Obvio que hay una gran cantidad de personas que realmente necesitan el carro, pero estoy seguro que la gran mayoría no lo necesita para esos desplazamientos, solo lo necesitan para ganar aprobación social, respeto y autoestima.

Yo no puedo ir en bici al trabajo porque laboro fuera de la ciudad, en Cajicá exactamente, así que el recorrido es muy largo para la bici, además que la empresa me proporciona un transporte.

Pero de resto voy en bici a todas partes, me importa un pepino que todo el mundo piense que soy un muerto de hambre, me siento mejor que el común de la gente, mi medio de transporte me hace realmente una mejor persona física y psicológicamente, hago deporte al mismo tiempo que me desplazo, hacer deporte es bueno para la mente, es anti estrés, genera una extraña felicidad, es sumamente divertido, y los que andamos en bicicleta sabemos que estos aparatos también tienen su ciencia y hay bicicletas de bicicletas, he visto bicis de 100mil pesos en el mercado, pero también hay de millones, hace poco vi una en venta por 26 millones de pesos USADA ! Obviamente un juguete de carreras, casi toda en fibra de carbono, tecnología de carreras, ultraliviana, etc,

Hay bicicletas que valen más que muchos carros que se ven a diario, pero realmente poco importa cuanto valen, lo que importa es cuanto se disfruten, a mi me fascinan los carros, fui “kartista” amateur, hice curso de piloto de carreras en el autódromo, etc. Para mi los carros son una tentación casi sexual, me fascina conducirlos y tan rápido como pueda de manera segura por supuesto, para eso hice el curso obviamente.

Pero el problema es que la mayor parte del tiempo la gente no puede disfrutar sus carros, no sirve de nada tener un BMW M5 si se va a meter en los trancones de las horas pico, es un carro muy deportivo que no se disfruta en un trancón, imposible. Tenga por seguro que alguien en bicicleta a la misma hora por la misma vía la va a pasar mejor que usted en su súper carro. ¿Más comodidad? Para comodidad cómprese un sofá, no un carro de alto rendimiento por Dios, ¿seguridad? depende, en la bici lo pueden atropellar, pero para robarle el carro le pueden disparar, a un conocido que no puedo nombrar le robaron el carro luego de sacarlo cero kilómetros (totalmente nuevo) del concesionario. Entonces, como dicen por ahí… Dios y suerte.

Los buses y las busetas me parecen una verdadera tortura, el Transmilenio peor aun (pero hay que hacer fila para que lo embutan a uno… y encima pagar), a los taxistas los odio con toda mi alma, porque se han vuelto una asociación legal de criminales organizados (me perdonan los 2 o 3 taxistas honrados). A pie es medio peligroso y terriblemente lento, la moto es como el futbol… saca lo peor de las personas, la gente en moto se vuelve atrevida, peligrosa, atravesada, gamina, etc., solo me queda la bici, es un punto medio, no va muy rápido, apenas lo suficiente para hacer tiempos decentes en trayectos medianos y cortos, con eso me basta y me sobra, aparte que me divierto como un niño.

Para mi los que andamos en bicicleta somos una especie de nueva élite, pero una élite muy selecta, una especie de Men in Black, aparentamos un bajo perfil pero por dentro hay una cultura muy bacana, mujeres (pocas) y hombres que disfrutamos llevar las riendas de nuestros destinos, nos gusta ser el motor de nuestras máquinas, nos gustan estos fierros que tienen toda una ciencia (solo los ignorantes creen que son apenas 3 varillas con ruedas), en fin, la bicicleta no es para todo el mundo, se necesita ser un poco niño, ser muy soñador, idealista… etc.

Pendejadas que escribe uno para no dejar morir el Blog, es que trabajar y ser blogger es duro jejeje. Y pues los navegadores Web (mi tema principal) no han dado noticias de importancia por estos días, ya dentro de poco espero que tengamos el primer Beta de Opera 10, que espero sea como me lo imagino. (si soy fan a morir de Opera y no lo cambio por nada).

Hasta la próxima y perdón por la demora.